Si bien es verdad, que la vigilancia marítima es sumamente importante para poder evitar filtraciones de baques enemigos y de barcos pesqueros, lamentablemente la Marina de Guerra del Perú tiene grandes falencias para poder cumplir dicha misión.
Pese a ello, los esfuerzos por cumplir dicha misión no cesan. Es así, que
hace unos meses atrás, la Marina de Guerra del Perú incorporó a su flota dos
lanchas de interdicción marítima
Defiant45 unidades adquiridas de la empresa norteamericana Metall Shark Boats para así fortalecer sus capacidades contra
cualquier acto ilícito que ocurra en el mar.
También se supo que la adquisición de estas dos lanchas fue mediante un
contrato valorizado en 3.5 millones de
dólares bajo el denominado Proyecto de Creación de los Servicios de interdicción Marítima en el Dominio
Marítimo Nacional.
Este proyecto a largo plazo contempla la adquisición de hasta 24 naves de interdicción para la Dirección General de capitanías y Guardacostas. Las lanchas nombradas BAP Punta Sal y BAP Cabo Blanco tienen una eslora de 14.07 metros ,manga de 4.12 metros y desplazan 15.45 toneladas. Su propulsión se basa en dos motores caterpilar C12 de705 BHP, los que le permiten alcanzar 41 nudos de velocidad máxima sostenida por hasta 5 horas. Mientras en su autonomía es de 8.7 horas a 25 nudos (220 millas náuticas).
El 45 Defiant de Metal Shark ha sido diseñado para misiones militares, policiales, El 45 Defiant
en configuración de Patrulla Militar incluyen iluminación policial, sirena /
megáfono, soportes de armas, poste de remolque y carrete de remolque.
Acuerdo sin efecto.
En setiembre del 2019, Metal Shark anunciaba su expansión con un acuerdo de
coproducción de varios años de 24
lanchas Defiant 45 con el astillero peruano Servicios Industriales de la Marina
(SIMA- PERÚ SA).
Es más, el CEO de Metal Shark, Chris Allard, manifestaba en aquella
oportunidad que "Este acuerdo representa un compromiso cooperativo de
Metal Shark y SIMA, el astillero nacional de Perú, para expandir dramáticamente
la influencia de Metal Shark en Perú".
Sin embargo, por motivos de aun se desconocen la coproducción de estas lanchas quedo de
lado y afectando los planes de la armada peruana en su lucha contra interdicción
marítima.
Nuevo acuerdo con SAAB
Por lo que, al no atender sus requerimientos acordados, la Marina de Guerra
optó por la colaboración con el astillero sueco Dockstavarvet filial de la
empresa sueca SAAB para la coproducción de lanchas tipo CB90.
Se supo, que las dos primeras lanchas ya se encuentran en construcción en
los astilleros suecos por un valor de 4.8 dólares, y al culminar su
construcción, SIMA empezará a construir las siguientes hasta completar las
24 lanchas que necesita la Marina
gracias a la transferencia tecnológica que comparte la empresa sueca con SIMA.
El Stridsbåt 90, más conocido como el CB90 (por Combat Boat 90), es una
clase de embarcaciones ultrarápidas de asalto militar desarrollada
originalmente para la Armada de Suecia por los astilleros Dockstavarvet. Además
de las muchas variantes en servicio con la armada sueca bajo la denominación
Strb 90 H, el CB 90 ha sido adoptado por las marinas de varios países, entre
ellos Noruega (como S90N), Grecia y México (CB 90 HMN).
El CB90 es un barco extremadamente rápido y ágil. Su peso ligero, de poco
calado, y sus turbinas (waterjets) le permiten operar a velocidades de hasta 40
nudos (74 km/h) en aguas costeras poco profundas. Los jets de agua junto con el
control bajo el agua permite al CB90 ejecutar curvas a velocidades
extremadamente altas y una desaceleración desde la velocidad máxima a un paro
total en 2.5 esloras.
Tripulación
Otra ventaja de este tipo de lanchas es que, la tripulación cuenta por 3 (dos oficiales y un ingeniero) y puede
integrar hasta 18 soldados con equipos anfibios completos.
Armamento
Entre sus capacidades de ataque este tipo de embarcaciones cuenca con tres ametralladoras
Browning M2 , una lanzagranadas Mk 19 y
cuatro mina marinas o seis Cargas de profundidad.
Importante proyecto
Como se recuerda, en junio de 2020 el Servicio Industrial de la Marina
(SIMA Perú) acordó la adquisición del diseño, los planos, materiales y
herramientas para el ensamblaje, trabajo conjunto y asistencia técnica para la
construcción de las dos primeras CB90.
A la fecha, los juegos de planos ya están en las oficinas en el Callao para
su revisión por los ingenieros del SIMA, mientras que los primeros suministros
de paquetes CKD (Complete Knock Down o completamente desensamblado) llegarán en
febrero próximo para proceder con la fase de construcción.
Se trata de una sola plataforma con capacidad para múltiples misiones,
capaz de adaptarse a diferentes operaciones a pedido del usuario: interdicción
marítima ante ilícitos en alta mar; interdicción ribereña en ríos navegables
(en la Amazonía) así como lacustres (en el Lago Titicaca).
Tiene un casco de aluminio reforzado y una rampa de proa que le permite
asumir operaciones militares con infantería de marina o comandos anfibios para
desembarco en zonas costeras o ribereñas de difícil acceso.
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